
Es el Sabbat de fertilidad y primer día del verano, el clima se calienta y las flores y plantas crecen. Se recolectan frutos silvestres que ya están empezando a madurar. Es una época feliz en la que se plantan los cultivos, los animales se aparean y comienzan los rituales al aire libre.
Los días grises y plomizos son un recuerdo. La luz renace con más fuerza y el fuego es protagonista. Recordamos a nuestros antepasados, aquellos que llamados Tuatha Dé Danaan, pusieron sus pies en Erin, tras quemar sus naves, expresando de aquella manera su intención férrea de establecerse en la Tierra Esmeralda. Comienza Samos, el fin del Invierno celta y comienzo de la mitad lumínica de la Rueda Anual. Es nuestro primer festival del fuego. Esta fiesta, es igual de importante que la de Samhain, una es un paso hacia Samos y la otra hacia Giamos.
Se camina alrededor de los límites de la propiedad, se reparan cercas y marcas de territorio. Hay danzas de espadas, fiestas, música, bebidas y baños a las doncellas para que no pierdan su belleza juvenil. Se elige entre los jóvenes a la Reina de Mayo y al Hombre Verde, representaciones de los Dioses. Asumen el cargo por esta noche o durante todo el año, siendo los guías espirituales. Por ello, deben estar iniciados en la magia. En muchas culturas la Reina de Mayo, la mujer que representaba a la Diosa, cabalga sobre un caballo blanco y su compañero sobre uno negro. Para los nórdicos eran los dioses Frey y Freya, el Señor y la Señora de cuya unión surge la fertilidad en primavera. En muchas ciudades durante todo ese mes se hacían repicar las campanas de las iglesias durante toda la noche, para auyentar a las brujas, a fin de que no pudieran realizarse los ritos propios de Beltane.

En la antigüedad, existía el temor de que la Tierra continuara dormida y en barbecho si no se la despertaba adecuadamente en el Festival de Fuego de Beltane. Es por eso que esta fiesta implica risas, música, danza, todo aquello que pueda despertar a la Tierra de su letargo. Los bailarines de Morris despertaban a la Tierra de su sueño invernal golpeando rítmicamente unos palos contra el suelo mientras bailaban para pedir el retorno de unas cosechas abundantes.
Es el momento en que las preocupaciones y los miedos del invierno son desechados, dando paso a les exuberancia juvenil, la actitud juguetona y la sexualidad. La gente baila eufórica alrededor de los mayos en una representación simbólica de la unión entre la Diosa y el Dios, creando un Círculo Sagrado de abundancia.

Gente joven pasa toda la noche en el bosque haciendo el amor para bendecir el campo y fertilizar el suelo. Otras parejas se quitan las alianzas y sus restricciones. Es tiempo de excitación salvaje y día para apreciar el cuerpo y su capacidad divina para el placer. Se honra al sexo en su aspecto creativo, como portador de alegría y generador de nueva vida. Los niños concebidos en este día son llamados “alegremente venidos” y se decía que estarían bajo la protección de los dioses. Beltane es la reivindicación del cuerpo como algo sagrado. El sexo no es pecado, hacer el amor en los campos, asegura una buena cosecha en otoño.

Beltane es el momento de honrar la capacidad cretativa, como indica Shinoda Bole: “El trabajo creativo surge de una implicación intensa y apasionada: casi como con un amante, la artista interactúa con “lo otro” para crear el ser de algo nuevo. Esto “otro” puede ser una pintura, una forma de danza, una composición musical, una escultura, un poema o un manuscrito, una nueva teoría o invento, que durante un tiempo es completamente absorbente y fascinante. La creatividad también es un proceso “sensual” para muchas personas; es una experiencia sensorial en el momento que abarca el tacto, el sonido, las imágenes, el movimiento y, a veces, incluso el olfato y el gusto. Un artista sumergido en el proceso creativo, lo mismo que un /a amante, muchas veces descubre que todos sus sentidos son potenciados y que recibe impresiones de la percepción a través de muchos canales.”
Beltane trae consigo esperanzas de amor, prosperidad, amistad y paz. Los jóvenes celtas acostumbraban a pasar la noche en los bosques, sobre todo las parejas. Antes de amanecer, se va a una colina para bañarse en los rayos del Sol o se da un baño en un manantial o fuente sagrada. Las mujeres se lavan la cara con el rocío de Beltane y lo recolectan para usarlo en baños de belleza, bebida para la sulud o en rituales posteriores. Se recogen flores, especialmente espino, para alegrar el día y adornar templos y altares.

Es la fiesta sagrada de la Unión, y la fecha ideal para una Unión de Manos. Estas uniones eran conocidas como matrimonios bajo los árboles. La pareja atada de esta manera convivía durante un año y un día y, una vez transcurrido el plazo, podían seguir juntos o seguir cada uno por su lado. Si surgen nuevas parejas podrán renovar votos el próximo Beltane si ambos están de acuerdo. Momento para el amor y la unión, representando la divina unión de los Dioses.
Se celebran festejos, banquetes y rituales. Las mesas se adornan con flores recién cogidas y se intercambian cestas deseando fertilidad y un próspero verano. Los rituales son eróticos, simbolizando la unión de los Dioses y la concepción del Dios por la Diosa en el Gran Rito.
Pero Beltane no sólo es eso. Es una celebración de la vida en todos los sentidos, para ser felices. La Diosa es alegría, y ser felices es lo mejor que podemos hacer para honrarla. Podemos hacer una fiesta. Preparar nuestra comida favorita, o un postre especial. Podemos pasear por el bosque oliendo, acariciando, saboreando, mirando, oyendo cada minúscula brizna de hierba, porque ahora es el momento de celebrar cada uno de nuestros sentidos.

“Beltane es la fiesta de la pasión y purificación. El calor de la creación fluye en la sangre. Se manifiesta en las relaciones personales en la tierra que florece con toda la plenitud de su crecimiento y creatividad” . Cerridwen Iris Shea
FELIZ BELTANE PARA TODOS Y TODAS!!!!!!!!!

